San La Muerte
santo popular y amuleto de Argentina / De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
Estimado Wikiwand AI, Seamos breves simplemente respondiendo estas preguntas clave:
¿Puede enumerar los principales datos y estadísticas sobre San La Muerte?
Resumir este artículo para un niño de 10 años
San la Muerte es un santo popular venerado en la región del Cono Sur, cuyo culto se encuentra en el Paraguay, noreste de la Argentina, principalmente en la provincia de Corrientes el litoral norte del Uruguay, departamentos Salto y Artigas y en el sur de Brasil, estados de Paraná, Santa Catarina y Río Grande del Sur. Desde la década de 1960 debido a las migraciones internas el culto se ha extendido a otras provincias argentinas como Jujuy, Santa Fe, Buenos Aires, especialmente el Conurbano, y la Capital.[1]
Este artículo o sección tiene referencias, pero necesita más para complementar su verificabilidad. |
A diferencia de otros santos populares, personajes reales reverenciados por los hechos de su vida o por sus padedimientos frente a las autoridades, San La Muerte no se basa en ninguna persona; sino que representa a la misma Muerte. La Iglesia Católica rechaza expresamente su culto.
San La Muerte es una figura iconográfica, y sus imágenes, talladas generalmente en madera o hueso, sirven de amuleto. La representación más común es un esqueleto humano que porta una guadaña, aunque existen estatuillas con la figura sentada o acuclillada, sin guadaña, con las manos apoyadas en el mentón o en la nuca. En ambos casos se originan en representaciones europeas, sea de la Muerte, identificada con la Parca de la tradición clásica, o con el llamado Señor de la Paciencia.
Según sus devotos, san La Muerte es el protector de las personas socialmente excluidas u oprimidas; motivo por el cual los delicuentes, que se perciben como tales, y los reos lo han adoptado como patrono.
Algunos autores pertenecientes a las religiones afroamericanas de la Santería o la Quimbanda consideran a San la Muerte como un Orisha, una interpretación que no es compartida por otros referentes, quienes consideran que se trata de un ser ajeno a las propias tradiciones.