Quinto hueso metatarsiano
De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
El quinto hueso metatarsiano es un hueso largo del pie, y es palpable a lo largo de los bordes externos distales de los pies. Es el segundo más pequeño de los cinco huesos metatarsianos. El quinto metatarsiano es análogo al quinto hueso metacarpiano de la mano[1]
Quinto hueso metatarsiano | ||
---|---|---|
El quinto metatarsiano. (Izquierda.) | ||
Huesos del pie derecho. Superficie dorsal. El quinto hueso metatarsiano es el hueso amarillo más a la derecha. | ||
Latín | os metatarsale V | |
Al igual que los otros cuatro huesos metatarsianos, puede dividirse en tres partes: base, cuerpo y cabeza.
La base es la parte más cercana al tobillo y la cabeza es la más cercana a los dedos del pie. La parte estrecha del centro se denomina cuerpo (o eje) del hueso. El hueso es algo plano, por lo que tiene dos superficies: la plantar (hacia la planta del pie) y la dorsal (la zona que mira hacia arriba al estar de pie).[1] Estas superficies son rugosas para la fijación de los ligamentos. El hueso está curvado longitudinalmente, de modo que es cóncavo por debajo y ligeramente convexo por encima.
La base se articula por detrás, mediante una superficie triangular cortada oblicuamente en sentido transversal, con el cuboides; y medialmente, con el cuarto metatarsiano. El quinto metatarsiano tiene una eminencia rugosa en la cara lateral de su base, conocida como tuberosidad o apófisis estiloide. La superficie plantar de la base está estriada para el tendón del músculo abductor del meñique.
La cabeza se articula con la quinta falange proximal, el primer hueso del quinto dedo.
Una fuerte banda de la aponeurosis plantar conecta la parte saliente de la tuberosidad con la apófisis lateral de la tuberosidad del calcáneo.