Antípatro de Idumea
De Wikipedia, la enciclopedia encyclopedia
Antípatro I de Idumea (m. 43 a. C.) fue el fundador de la dinastía herodiana y padre de Herodes I el Grande. Según Flavio Josefo, fue hijo de Antipas y había llevado anteriormente ese nombre.[1]
Antípatro de Idumea | ||
---|---|---|
Información personal | ||
Nacimiento |
113 a. C. Edom | |
Fallecimiento | 43 a. C. | |
Familia | ||
Familia | Dinastía herodiana | |
Padre | Antipas | |
Cónyuge | Cipros (desde 75 a. C.) | |
Hijos | ||
Información profesional | ||
Ocupación | Estadista | |
Natural de Idumea, al sureste de Judea, entre el mar Muerto y el golfo de Aqaba, que durante los tiempos bíblicos era conocida como la tierra de Edom, Antípatro se convirtió en un poderoso funcionario bajo los últimos reyes asmoneos y posteriormente en cliente del general romano Pompeyo el Grande cuando este conquistó Judea en nombre de la República romana.[2]
Cuando Julio César venció a Pompeyo, rescató a César en Alejandría y fue nombrado ministro principal de Judea con el derecho de recaudar impuestos. Hizo finalmente a sus hijos Fasael y Herodes gobernadores de Jerusalén y Galilea respectivamente. Después del asesinato de César, se vio obligado a estar del lado de Cayo Casio Longino contra Marco Antonio. Su política prorromana le llevó a una creciente impopularidad entre los devotos judíos sin helenizar. Murió envenenado.
Su diplomacia e ingeniosa política, así como su influencia en la corte asmonea, allanaron el camino para el ascenso de su hijo Herodes, que utilizó esta posición para casarse con la princesa asmonea, Mariamna I, hacerse querer en Roma y devenir rey de Judea bajo la influencia romana.