El asedio de Pamplona fue el sitio que sufrió la capital navarra por tropas realistas y francesas entre el 10 de abril y el 17 de septiembre de 1823 durante la invasión de los Cien Mil Hijos de San Luis que pusieron fin al régimen constitucional del Trienio Liberal en España. Durante el largo asedio de más de cinco meses la ciudad sufrió numerosos bombardeos que causaron muchos daños y muchas bajas entre las fuerzas constitucionalistas que la defendían. Pamplona fue una de las ciudades que opuso más resistencia al invasor francés y a los realistas que lo apoyaban en defensa del régimen liberal. Solo dos semanas después el rey Fernando VII recuperaba sus poderes absolutos y derogaba la Constitución y toda la legislación del Trienio